Continuamente la publicidad en el ámbito que aquí tratamos, nos anuncia ordenadores más rápidos, móviles con pantalla más grande y más resolución, o tablets con mejores procesadores de varios nucleos, pero hay veces que los productos avanzan en una dirección más básica.
Raspberry Pi surgió con la idea de ofrecer una placa de ordenador asequible económicamente con fines educativos en el Reino Unido, para promover el estudio y experimentación con la computación en este país. De esta manera anunciaron un modelo de Raspberry A a solo 25$, y posteriormente Raspberry B a 35$ ya con posibilidad de conexión a internet.
Con esos precios, se obtiene un procesador a 700MHz, 256MB de memoria RAM y una tarjeta SD en lugar de disco duro, prestaciones muy básicas, pero muy interesantes para ese precio, sobre los que puede ejecutarse linux. El que no tenga carcasa, y sea solamente una placa ha motivado que se le busquen distintos acomodos.
Actualmente hay lista de espera para aquirirlo, ya que la producción se vendió rápidamente, y ha surgido todo un ecosistema alrededor de desarrolladores, para explotar sus capacidades.
Por otra parte tenemos Arduino, un tarjeta con microcontrolador, que puede venderse ya ensamblada, o para montar, caracterizada por ser de hardware abierto, por lo que se puede modificar y distribuir libremente, y también de software libre, programable bajo muchos lenguajes de programación. También cuenta con su propia comunidad, y con un poquito de habilidad en electrónica y programación, se pueden conseguir aplicar a multitud de situaciones, como por ejemplo, servir cócteles, regar plantas, o abrir puertas de hotel cuando se te "olvida" la llave. También da un paso hacia el llamado internet de las cosas, del que hablaremos próximamente, de la mano de Telefónica.
En definitiva, se trata de dos proyectos encuadrados en la llamada cultura libre, que tienen en común que son herramientas relativamente básicas, pero que se pueden modificar, y utilizar libremente, de forma que ha posibilitado que surja una comuidad a su alrededor para experimentar, y sacarles rendimiento. Es un caso más en que surgiendo la herramienta, surgen posteriormente las aplicaciones para sacar partido a esa herramienta.
Seguro que día a día vamos viendo más aplicaciones de Raspberry Pi y Arduino, cada uno en su campo. Les iremos haciendo seguimiento, ¿son proyectos interesantes, verdad?
0 comentarios:
Publicar un comentario